Baleares registró el 4,8% de las asistencias en el puente de diciembre 2018.

Reducir las incidencias en la carretera es posible este puente de diciembre

Las temperaturas han bajado, y el frío ha llegado para quedarse, acompañado de menos horas de luz y mayor riesgo de precipitaciones fuertes. Ni la lluvia ni la nieve nos van a sorprender este puente, pero no debemos olvidar que el descenso de los termómetros también lleva a una mayor posibilidad de placas de hielo en la calzada, y que todo esto exige un cuidado y una atención extrema al conducir.

Según los datos de AXA Partners el año pasado del total de asistencias dadas durante el puente de la inmaculada, la mayor parte fueron averías, con un 72% (esto comprende fallos en el arranque 32%, averías mecánicas 40%), seguidos de problemas con los neumáticos que supusieron 14% del total, y el 11% fueron accidentes (Colisiones 7% y salidas de vía 4%) finalmente problemas como pérdidas de las llaves 2% y fallos de combustible 1%.

Las provincias con mayor número de incidencias atendidas por los especialistas de AXA Partners en el puente de diciembre en 2018 fueron: Barcelona con un 8,9%, Madrid con 8,5% seguido de Baleares con 4,80%. Mientras que las que menor número de incidencias presentaron fueron: Ávila, Teruel y Soria con un 0,20% de los casos cada una.

Los expertos en auto de AXA Partners nos dan unas claves y consejos básicos de seguridad para que la conducción sea fiable en estas condiciones adversas, aunque habituales. Lo primero será la anticipación, planear el viaje consultando el parte meteorológico de forma previa, y una vez decidido el destino y la distancia a recorrer, revisar los puntos habituales del coche.

Si se va a hacer un viaje este puente, y el coche se va a enfrentar a largas distancias, se debe comprobar que el vehículo se encuentra en perfecto estado. De este modo revisar el estado de ciertos puntos clave como: neumáticos, es importante tener en cuenta que la presión de los mismos ha de ser diferente en verano y en invierno, y que la misma dependerá del fabricante; el nivel de los líquidos, incluido el limpiaparabrisas; las lámparas, la importancia de este punto es mayor en esta época del año, ya que al reducirse las horas de luz natural se hará mayor uso de las del vehículo, además de que bajo condiciones climatológicas adversas la visibilidad se ve reducida; los frenos y la suspensión.

En caso de que el coche lleve tiempo sin pasar una revisión, es conveniente antes de un viaje largo llevarlo a un taller en el que un experto revise el estado de ciertos componentes, como la correa de distribución, los discos, las pastillas o las zapatas, y la batería. Las bajadas de temperatura pueden afectar a las mismas ya que a los vehículos les cuesta más arrancar con frío.

En cuanto a la conducción el principal consejo es aumentar la distancia de seguridad con el vehículo que precede. Es necesario tener en cuenta que, aunque el tiempo de reacción por nuestra parte no varíe, sí puede hacerlo la distancia de frenado, que puede aumentar si hay agua en la calzada o una placa de hielo, pudiendo llegar a multiplicarse por 10.

Las precipitaciones y la apertura de varias pistas de esquí animan a muchos a desplazarse hasta las estaciones para disfrutar de los deportes de invierno, si se conduce por nieve los profesionales recomiendan evitar movimientos bruscos con la dirección y el acelerador, mover el volante con suavidad, y reducir la velocidad, así como circular con marchas largas para no perder tracción, y evitar volantazos. Además en caso de nieve evitar pisar las rodadas de otros vehículos por la posible formación de placas de hielo, y pasar con cuidado por zonas sombreadas en las que la posibilidad de las mismas es mayor. En caso de inestabilidad e inseguridad en la conducción, la mejor opción es buscar un área de descanso y esperar a que la situación mejore.

Por último es conveniente comprobar si se tiene combustible suficiente para enfrentarse al recorrido o localizar gasolineras donde llenar el depósito durante el trayecto, meter en el maletero las cadenas que serán necesarias en caso de nieve, y llevar el móvil con la batería cargada por si fuese necesario usarlo en una emergencia.